Los salones de juego que se dedican a las apuestas están proliferando en todas las ciudades. Incluso podemos verlos en los grandes centros comerciales. Y no es una casualidad, la gente cada vez realiza más apuestas deportivas y se nota.
Solo hay que ver cómo han cambiado las publicidades durante los encuentros deportivos, ahora son las grandes compañías de apuestas las que protagonizan la mayor parte de las pausas deportivas e incluso tienen sus nombres sobre las camisetas de los equipos.
Máquinas de apuestas en los bares
Al margen de los grandes salones de juego también nos encontramos máquinas de apuestas deportivas en los bares. Son un excelente reclamo en lugares en los que la gente se reúne de manera habitual para ver los encuentros ya que de paso que ven el partido pueden realizar una pequeña apuesta para darle emoción y sin tener que registrarse en las casas de apuestas online, algo que no todo el mundo sabe o quiere hacer.
Cada vez es más habitual que antes del partido o durante el mismo se realicen algunas apuestas, normalmente por importes pequeños, para darle algo de sal y pimienta al encuentro. Más o menos lo mismo que siempre se ha hecho con la quiniela, pero ahora de forma inmediata.
El hecho de que las apuestas se puedan hacer al momento y que al momento también se puedan conocer los resultados si se apuesta sobre un encuentro que se está realizando, hace que sean muy atractivas para mucha gente.
La legislación
Tanto los salones recreativos, como las máquinas de apuestas, están sujetos a una estricta regulación, lo mismo que las casas de apuestas online. Los menores de edad no pueden acceder a ninguno de estos lugares y los premios que se consiguen están sujetos a impuestos y deben de declararse siempre que superen en total los mil euros.
No obstante, cuando se apuesta en máquinas de bares o en locales físicos, solo hay que declarar las ganancias que superen los tres mil euros, ya que son las únicas que se registran a nombre de la persona.
En cualquier caso, estas son las reglas generales y pueden cambiar en algunas comunidades autónomas, por lo que hay que estar al tanto de la legislación. Es importante declarar las ganancias cuando corresponde ya que de lo contrario estaríamos incurriendo en un fraude y podríamos ser multados.
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